sábado, 6 de octubre de 2007

El abraazo partido


El cine desde hace un buen de rato ha sido mi fascinación y mi pequeña droga legal e incomprendida por muchos. Me he unido a uno que otro círculo de cine para juntarme con otros tipos que no tenemos nada en común más que criticar y echar mierda y flores a las películas que nos hacen dormir en una butaca o salir de la sala a encender un cigarro de felicidad.

Hoy me largué a ver esta película.

El abrazo partido es un filme logrado en Argentina dirigido por Daniel Burman en el 2003.

Al principio pensé que estaba sentado ante un documental argentino y contemplé en mi cabecita la idea de largarme en cuanto antes de la sala... No se que hizo detenerme, pero que bueno.

¿Porque pensé que era un documental? Porque esta película está maravillosamente controlada y planeada desde el casting hasta los diálogos logrando como resultado un trabajo que me dejó con la boca abierta. No parece que estés viendo a un tipo actuar.

La historia de un joven un poco incómodo con su vida, su pasado, el de su familia es lo que cuenta este filme. Empieza demasiado bien con un traveling que muestra el contexto del evento. Todo acontece en una galería comercial donde se presentan todos los personajes y los roles que desempeñan en ese edificio. Hay desde el tipo que repara radios, la tipa que engaña a su esposo, el que vende telas hasta la vendedora de lencería (madre del protagonista).

Con un ritmo despiadadamente marcado sin tener una pizca de monotonía, se divide esta película como se divide un libro en capítulos, con títulos e intros.

¿Recomendada? Pues.. no es mi favorita. La volvería a ver muchas veces. Es muy muy buena.